
Subir al coche, girar la llave del contacto y ver que el icono de la batería se enciende para posteriormente apagarse cuando el motor ha arrancado es prácticamente un mantra diario para muchos conductores. Como norma general si no tenemos testigos encendidos es porque todo está en orden y podemos conducir tranquilos, pero hay uno que siempre se enciende cuando damos el contacto y no desaparece hasta que arrancamos en coche: el testigo de la batería.
¿Por qué aparece y desaparece?
La presencia de este testigo tiene una misión muy concreta y tan sencilla como vital. Su iluminación al activar el contacto nos indica algo tan básico como que estamos consumiendo energía acumulada en la batería pero que no está recibiendo corriente para recargarse. Una vez arrancamos el vehículo el alternador empieza a girar generando corriente de 12 V que alimenta la batería y el resto de dispositivos que necesitan electricidad para funcionar.
¿Qué significa cuando el testigo se queda encendido?
Si el coche ha arrancado pero el testigo de la batería permanece fijo y encendido es que algo no está funcionando bien en el sistema eléctrico. Aunque el coche esté arrancado y funcione con normalidad nos indica que por el motivo que sea la batería no se está cargando.
¿Qué avería nos indica?
Aunque pueda parecer lo contrario, el sistema eléctrico de los coches convencionales es bastante sencillo. Básicamente se trata de un alternador de electricidad, una batería para acumularla y el resto son consumidores de esa energía.
Cuando el testigo de la batería se queda encendido en una posición fija nos indica un fallo que sólo puede tener dos explicaciones: Fallo en las conexiones eléctricas por deterioro de los terminales o cables, o bien que el circuito de carga no esté funcionando.
Que un alternador no cumpla con su misión se debe principalmente a dos motivos. El primero es que simplemente haya llegado al final de su vida útil en una avería bastante común. La segunda opción es que en caso de funcionar mediante correa para recibir el giro del motor, ésta se haya partido o bien esté destensada y requiera mantenimiento o sustitución. Además dicha correa también en la mayoría de los coches mueve la bomba de agua u otros elementos necesarios para el funcionamiento del coche.
¿Qué hacer si el testigo de la batería no se apaga?
En caso de que el coche arranque pero el testigo de la batería permanezca encendido lo mejor es no jugársela. Emprender cualquier desplazamiento significa que el coche va a ir consumiendo la energía disponible en la batería pero no la va a recargar por lo que al llegar al destino posiblemente no arranque o, peor aún, nos deje tirados por el camino. La mejor opción es no arriesgarse y llamar a la grúa para que puedan revisar el estado del sistema en el taller más cercano.
¿Cómo lo solucionamos?
En este caso poner las pinzas para arrancar la batería no es más que una solución temporal y que no suele dar buen resultado. Cuando vuelva a quedarse sin carga acabará por volver a dejarte tirado… si es que ha llegado a arrancar.
La única solución posible si el alternador se ha estropeado es cambiarlo por uno nuevo, sustituir la correa si es la que está dando problemas si el alternador está bien y poner una batería nueva o en su defecto ponerla a cargar para que recupere su capacidad.
Fuente: www.motorpasion.com