
Tal y como su nombre sugiere, el inmovilizador antirrobo consiste en un dispositivo electrónico incorporado en la propia llave de nuestro coche, de forma que al retirarla se pueda evitar un arranque no autorizado del vehículo. Si bien fue inventado en 1986 y su uso se extendió en países como Alemania a lo largo de la década de los 90´s, hoy el inmovilizador antirrobo es un aliado más que recurrente a la hora de potenciar la seguridad de nuestro vehículo.
La historia de la seguridad en los coches comienza a principios del siglo XX, momento en el que los primeros vehículos tan sólo contaban con un rudimentario sistema de manivelas para cerrar (y proteger) un coche. Con el paso del tiempo, la presencia de una llave se volvió imprescindible, si bien la era digital supuso la aparición de nuevas formas de proteger un vehículo, siendo el conocido como inmovilizador antirrobo un sistema tan práctico como quizás desconocido aún por las grandes masas.
¿Cómo funciona?
El inmovilizador consigue su cometido gracias a la inclusión de aliados como un transpondedor incluido en el cabezal de la propia llave, el cual emite una señal a través de radiofrecuencia y, por ende, activa la puesta en marcha del motor del vehículo cuando su dueño se dispone a arrancarlo. De lo contrario, se activa el bloqueo del motor.
El transpondedor, también conocido como llave con transponder, es sumamente importante para el funcionamiento del inmovilizador antirrobo, ya que funciona a través de un código exclusivo e intercambiable que asegura el arranque por parte de quien la posee.
En cualquier caso, la presencia de la llave con transponder es tan sólo uno de los diferentes tipos de inmovilizadores antirrobo que existen en el mercado.
Tipos de inmovilizador antirrobo
A la hora de decantarnos por un tipo de inmovilizador antirrobo, podemos decantarnos por diferentes opciones:
- Llave transponder: comentado anteriormente, es el tipo más utilizado. Se compone de una llave con un código instalado en un chip en el propio cabezal de la llave. Al introducir la llave en la cerradura, esta provoca una señal a la antena del clausor, la cual a su vez manda una señal al módulo inmovilizador.
- Comando remoto infrarrojo: utilizado especialmente por algunas marcas como Renault y Land Rover, este sistema se apoya en un control remoto que emite una señal concreta a la hora de habilitar el arranque de motor y la apertura de puertas. Este comando puede quedar instalado en la propia llave o en lugares diferentes y, a diferencia del anterior, no funciona con antena.
- Teclado numérico: este sistema, recurrente en varios modelos Peugeot, se conforma de un teclado instalado cerca del asiento del conductor, ya sea en la consola o junto a la caja de cambios. A través de un simple código memorizado por el conductor, el inmovilizador con teclado numérico desbloquea la unidad de control en aquellos coches electrónicos. Ford desde hace varios años lo usa como herramienta de acceso al auto, instalando el teclado numérico digital en la puerta y en modelos más recientes en el marco de la puerta.
- Tarjeta codificada: introducido en los modelos Renault Laguna, la tarjeta codificada sustituye el uso de llaves por una tarjeta codificada con unos determinados dígitos que no sólo permite desbloquear la puerta sino también el coche a través de un lector de tarjetas propio que alimente los diferentes circuitos del vehículo.
Fuente: blog.helloauto